Corren
Rumores
Hilario Olea
RARAS
CALIFICACIONES…Si alguien tiene por ahí el manual del buen gobierno de Hugo
Chávez no se han de extrañar los pasos que va siguiendo el actual gobierno
federal, porque son los mismos. Esperemos no sea el mismo resultado que tiene
sumida a Venezuela en la peor de las crisis económicas y sociales de toda su
historia. Los pasos han sido tomados al pie de la letra, como apoyar solo la
producción de petróleo y mentársela a las energías limpias y renovables. Aunque
es una apuesta arriesgada donde perdieron los venezolanos, que aunque no lo
crean, hoy se ven obligados a comprar petróleo y gasolina a Irán. En fin, el
caso es que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció en la semana que
prepara un “nuevo índice alternativo al
Producto Interno Bruto” con el que medirán ahora crecimiento, bienestar y lo
más importante, felicidad. Caray,
estamos como la Revolución Francesa, vamos a contrapelo del mundo. Solo falta
que cambien el nombre de los meses y los días.
FELICIDAD
PRIMERO…Asegura el presidente López Obrador que hay países donde se mide el
nivel de felicidad y eso es parte del bienestar. Cierto, pero hay un pequeño
detalle, eso se mide donde hay economía de mercado y programas sociales
respaldados por la riqueza que producen sus ciudadanos. En los países socialistas babaneros como
Nicaragua, Cuba o Bolivia, ahí no se pueden medir libremente porque todas las mediciones y encuestas ahí
si son cuchareadas. En otra parte tiene
razón, que se debe medir el bienestar en relación con el desarrollo. Pero no un
bienestar ficticio creado con fines electorales, porque como Venezuela, al tiempo
resulta peor el remedio que la enfermedad. El hecho de que huyeran de
ese país sudamericano cinco millones de personas, no es buena señal de que se
hayan ido porque estaban muy felices.
ASÍ
CUALQUIERA…Si usan el sistema venezolano
vamos a estar amolados. Porque Hugo Chávez en un arranque de populismo
se le ocurrió crear el Vice Ministerio de la Suprema Felicidad, y soltaron
dinero que fue un contento. Claro, era cuando el petróleo estaba caro y había
dinero para hacerlo. Como anécdota recuerdo en un viaje al extranjero a un
grupo de maestras venezolanas que iban en el tour. Por cierto, muy alegres y
simpáticas y chavistas a morir. Al preguntarles como hacían el viaje, nos
dijeron que a los maestros cada año tenían derecho a un viaje a cualquier parte
del mundo y además cinco mil dólares para gastos. Así, quien no iba a decir que
es feliz. Se imaginan, ir con gastos pagados a Europa o Tierra Santa. Pero lo
malo, era dinero no producto de recursos fiscales producidos por inversionistas
privados, sino se colgaban del petróleo hasta que tronó.
LA REGLA DE
TRES SIMPLE…Pero sin duda que hay que concederle al presidente el beneficio de
la duda y ver como plantea su nuevo
índice para medir crecimiento, bienestar y felicidad. Porque este es un
giro de timón, pues en campaña aseguraba que tendríamos un crecimiento de 4%,
porque sin crecimiento, les decía en su cara a los otros candidatos, no hay
desarrollo. Hoy, no se necesita crecer económicamente para que haya desarrollo
y bienestar. Bueno, hay que ver la fórmula, esperemos que no sea la del café
con leche nada más. Porque está la duda de donde saldrá tanta lana para esta
ocurrencia. La cochina realidad nos dice que durante el 2019 el crecimiento fue
de 0.01%. Eso y nada es lo mismo. Y los más optimistas, dicen que el
coronavirus va a provocar que tengamos crecimiento negativo, que si bien va,
será del menos 6%.
PEQUEÑO
PROBLEMA… Hay un pequeño problema que tendremos que enfrentar primero, que es
resolver el asunto de la crisis económica que provocará la pandemia. El punto
es el apoyo a través de paquetes de estímulos al sector productivo. En el Reino
Unido o sea Inglaterra están aplicando el 17.7% del PIB. En Francia 15.2, en
Italia 12.7, en USA 11%. Y en México el
0.7% para apoyar la economía que genera los empleos que se van a necesitar
para la recuperación económica. A menos que el gobierno federal pueda absorber
todos los empleos perdidos no se ve manera de salir tan fácil del bache. Menos
si no se quieren endeudar como dice el subgobernador del Banco de México,
Jonathan Heath, esto debido a que México tiene un gobierno que piensa diferente
a todo el mundo, lo que dificultará más la recuperación. Pero bueno, los
políticos y los porteros son lo mismo, tienen que tener suerte. Y a lo mejor un
sapo y le pega al clavo. Recuerden que
esto se acaba cuando cae el último out.
GUAU, GUAU,
GUAY… Caray como ladraron los perritos padrecistas el día de ayer por a columna
del monumento al tubo. Se ve que los tenían en ayunos de croquetas. Pero lo más vaciado que todos defendiendo al
acueducto, cuando ese tema ni lo tratamos. Solo hablamos del monumento al tubo
de la plaza de los Cien Años. Andan tan anémicos de neuronas que confundieron
la gimnasia con la magnesia. Pero además, si serán brutos, los que andaban a la
sorda los obligaron a mostrarse y todos se dieron cuenta de las cuentas y
trolles que moverá el grupo padrecista.
Caray, siguen igual, por eso les va como les va. Y además, solo provocan
risas con sus metidas de pata.
En fin,
sabadito lindo y querido y con la buena noticia que todos los Oxxos este día
estarán vendiendo cerveza, entonces
recordar lo que dijo el Indio Lencho, matanga dijo la changa y el toco, tocó.
Sale.
