Adelanta AMLO carrera presidencial

Kiosco Mayor

De Francisco Rodríguez

*México no está para desviar la atención

*Señaló a seis, pero ya salieron dos más

*Ebrard y Monreal ya levantaron la mano

Contrario a la costumbre, por la anticipación exagerada, el Presidente Andrés Manuel López Obrador dio el banderazo de arranque por la candidatura presidencial de su partido, MORENA, y la limita a seis personajes de su equipo mas cercano, tres hombres y tres mujeres, es decir también cuidó la paridad de género.

En apariencia, dejó fuera de la competencia al Senador Ricardo Monreal, sin embargo, puede ser una de sus estrategias para desviar la atención de quien podría ser el verdadero proyecto de López Obrador.

Los nombres mencionados son: Claudia Sheinbaum, Marcelo Ebrard (ambos, supuestamente son o eran sus principales alfiles) Tatiana Clouthier, Esteban Moctezuma, Rocío Nahle y Juan Ramon de la fuente.

De inmediato, Monreal dijo no estar descartado de ninguna manera y atribuyó el no ser mencionado, al respeto de López Obrador por un poder distinto al suyo, es decir al legislativo.

Tampoco mencionó, AMLO, a Gerardo Fernández Noroña, pero el diputado federal no se quedó atrás y él mismo se "destapó".

Muy a su estilo, López Obrador dijo que en MORENA no hay "tapados", eso ya es historia y afortunadamente, según él, hay muchas figuras del flanco progresista, liberal, y mencionó, entre esos muchos, a los ya señalados como posibles candidatos de su partido a la Presidencia de México.

Pero AMLO aun no concluye su tercer año de gobierno y parece imprudente desviar la atención hacia un proceso que le falta mucho por iniciar, al menos oficialmente. Lo acepte o no, el Presidente, esto distrae a quienes el mismo mencionó como probables candidatos porque los desvía del cumplimiento cabal de sus obligaciones como servidores públicos.

Un ejemplo: Marcelo Ebrard, el secretario de Relaciones Exteriores, ya se reunió el fin de semana anterior con un grupo de colaboradores y amigos, donde señaló que le toma la palabra al Presidente y sí va a competir por la candidatura´ (nota del diario Milenio).

El país pasa por una complicada situación social y económica, no únicamente por la pandemia sino por dudosas decisiones de gobierno que no ha logrado controlar la inseguridad pública, el sistema de salud y el incremento de la población en el segmente considerado de pobreza, y por ello requiere de toda la atención de sus funcionarios para salir adelante.

El compartir su tiempo con aspiraciones políticas electorales tan adelantas, aunque sea con permiso presidencial, no es conveniente, además de inmediato brota la duda del honesto manejo de los recursos que operan en sus respectivas dependencias. Es evidente habrá actos anticipados de campaña.

Por otro lado, la oposición a la 4T también de inmediato comienza a activar su proceso de selección de candidato, lo cual acelera la vida política-electoral mediante campañas donde desde luego se incluyen aquellas que buscan el deterioro de la imagen del actual gobierno y sus posibles candidatos.

Es decir, se entra a una dinámica que en nada le beneficia al país.

Apenas concluye una elección, cuando ya se aproxima una consulta para saber si la gente quiere o no se enjuicie a los expresidentes (aun no se de que se les acusa), luego viene otra para determinar si AMLO sigue o no como Presidente de México, habrá elecciones constitucionales en algunas entidades del país, y ya el mismo Mandatario de la Nación da pie para iniciar el proceso electoral del 2024. Y los electos en junio pasado aun no toman posesión de sus respectivos cargos.

Es difícil, casi imposible, controlar las ambiciones electorales y su exhibición de parte de los actores políticos, pero es inconcebible sean promovidas por el propio Presidente de la República, quien debería ser el principal factor de calmar esos intereses en un gobierno donde ni siquiera llega a la mitad de su gestión.

Twitter: @kioscomayor