Se les avisó con tiempo
El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
Hace poco más de un año, el periodista Jorge Morales Borbón informaba en sus espacios que el candidato de Morena a la alcaldía de Puerto Peñasco, Óscar Eduardo Castro Castro estaba siendo investigado por las autoridades estadounidenses porque familiares cercanos a él tenía vínculos con grupos criminales que operan en aquella región de Sonora
Morales Borbón documentó sus afirmaciones y presentó las evidencias documentales que daban sustento a su trabajo periodístico. En Morena guardaron silencio y nadie hizo caso a la alerta que se mandaba.
El propio Óscar Eduardo Castro hizo su propio vídeo donde, tirándose al piso se victimizó, atribuyó la información a un simple ataque electoral, tan comunes en las campañas, negó tener vínculos con grupos criminales y menosprecio la afirmación de que le fueran a quitar la visa, como ya lo advertía desde ese momento Jorge Morales; finalmente, el entonces candidato Castro Castro, pidió que lo dejaran en llevar su campaña política en paz.
En Morena y en el gobierno del Estado no pueden decir que ignoraban los antecedentes de Castro Castro y a pesar de eso lo dejaron que compitiera y así ganó la elección.
El martes, cuando le revocaron su visa de ingreso a Estados Unidos, todo lo anterior revivió y es que, dadas las circunstancias, no se puede menos que considerar que Castro Castro le compró la candidatura a Morena o bien, que existe una sociedad con políticos de niveles más altos con quienes se entendió y a quienes patrocinó.
Han pasado ya varios días desde la revocación de ese documento y es momento de la inexistencia de un posicionamiento: ni del gobierno del Estado, ni de Morena o de los partidos aliados que postularon a Óscar Eduardo; todos han guardado un ominoso silencio como si quedándose callados evitaran cualquier intento por ser asociados al presidente municipal de Puerto Peñasco.
Porque hay que entender muy bien la situación: al alcalde rocaportense no le quitaron la visa por alguna infracción administrativa, le fue revocada por los antecedentes que tienen sus familiares cercanos y que lo ligan a él con grupos criminales que operan en aquella zona del desierto de Sonora.
Como dice el refranero popular: “cuando veas las barbas de tu vecino cortar, pon las tuyas a remojar”.
Algunos otros presidentes municipales de esa zona y otros políticos deben estar pensando seriamente si es necesario acudir a Estados Unidos; ellos saben que en cualquier momento les pueden revocar su visa y más allá de la molestia que eso les implique en lo personal, lo que verdaderamente trasciende es que se posa sobre ellos una letra escarlata que los identifica como socios, protectores o beneficiados de actividades criminales.
No hay registro en la historia política de Sonora de que a un presidente en funciones le fuera revocada su visa de ingreso a Estados Unidos, Óscar Eduardo Castro es el primero a quien le sucede algo así, pero es muy probable no sea el último.
En muchos municipios de Sonora y de México existen otros “Óscar Eduardo Castro”, no todos son de Morena, los hay de todos los partidos políticos –aunque hasta el momento solamente son de Morena a quienes les revocaron su visa-- y son los primeros respondientes a los grupos criminales; pero ya no responden como socios, muchos son empleados que llegaron a la posición que ostentan simplemente para cuidar los intereses de sus verdaderos jefes.
Se espera la postura de Morena, lo cual es muy probable no suceda, pero de no hacerlo solamente dejaran constancia de que sus métodos de selección de candidatos son tan poco fiables que se les pueden colar narcos.
Y aunque nadie lo diga, esto es un problema mayor para el propio gobernador Alfonso Durazo; es un alcalde de su estado, de su partido y que hizo campaña con la presidente Sheinbaum Pardo.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- Luego de que Célida Teresa López se auto encartara para la candidatura al gobierno de Sonora, se le sumó ese portento de alcalde llamado Javier Lamarque Cano, quien primero dijo que no, luego que sí y ahora hasta presume un fuerte apoyo de los alcaldes del sur de Sonora.
A como van las cosas, en Morena piensan que Sonora es un botín político y que cualquiera lo puede gobernar –como dijo el expresidente ¿Qué tan difícil puede ser?—y por eso los enanos empiezan a crecer y sacan las uñas para asirse de cualquier arista que les permita cumplir sus aspiraciones personales.
Todo indica que el mensaje del gobernador, emitido el lunes pasado, les entró por un oído y les salió por el otro; porque en lugar de que las aguas se calmaran, empezaron a surgir otros alborotados ¡y los que faltan!.
2.- Manuel “Manu” Cáñez, era un buen funcionario que también hace las veces de operador electoral para Morena, despachaba como director del Instituto de Becas y Crédito Educativo, donde se le reconoce un excelente desempeño; pero cometió el error de andar operando en contra de los designios del gobernador Alfonso Durazo.
Este muchacho fue uno de los señalados de orquestar todo el entramado que le permitió a Daniel Humberto Acedo Fimbres ganar una magistratura para el Tribunal de Disciplina Judicial, con el pequeño detalle que no era el “palomeado” de Palacio de Gobierno.
Manuel Cáñez habría renunciado el martes 3 de junio, luego de trascender que también había renunciado la Tesorera del Gobierno del Estado, María Gardner Ortega, esposa de Acedo Fimbres y en la trama también aparecía el nombre de Celida Teresa López Cárdenas.
Pero luego de que ese mismo martes 3 de junio Daniel Humberto Acedo renunció a la magistratura ganada, las aguas volvieron a su nivel y todos se quedaron en sus puestos.
Pero ayer jueves 12 de junio, 9 días después de su primer despido, Manuel Cáñez anunció que dejaba el cargo y con esto se convirtió en el primer decapitado por la traición a Palacio. ¿Quiénes seguirán?.
Bien dijo Adolfo Salazar Razo: “nadie tiene asegurado su puesto en el gobierno de Sonora”.
3.- Durante el gobierno de Claudia Pavlovich, la Secretaria del Trabajo, a cargo de Horacio Valenzuela Ibarra presumió que en Sonora estaban atacando con todo el trabajo infantil y pugnaban por una infancia que se disfrutara entre juegos y escuela, fue un discurso recurrente que le escuché varias veces a Valenzuela Ibarra, pero que eran solamente palabras.
La realidad siempre termina por descubrir los discursos falsos, y la diputada Gabriela Danitza Félix Bojórquez, de Movimiento Ciudadano, sacó una cifra que debe ser alarmante: en Sonora hay casi 71 mil niños que están en situación de trabajo infantil y más de siete mil de ellos tienen una edad que apenas ronda entre los 5 y los 9 años.
Ese dato es alarmante, pero resulta más grave que desde hace 10 meses, la misma diputada Félix Bojórquez presentó una iniciativa de Ley en el Congreso del Estado para eliminar la mendicidad y el trabajo infantil, pero aún permanece en comisiones.
Con tantas instancias dedicadas a atender a la niñez sonorense, resulta alarmante la pasividad y negligencia que muestran con tantos niños que en lugar de estar trabajando, debieran estar estudiando, comiendo sanamente, con acceso a la salud, la diversión y a disfrutar plenamente esa etapa de su vida, pero en lugar de eso son víctimas de la necesidad y no hay ley alguna que les quite esa obligación laboral tan pesada.
Otros Juglares:
--“Están muy frustrados, la oposición está muy frustrada. Cada vez les hacen menos casos el pueblo de México, hay mucha frustración y probablemente están deprimidos, porque no tienen proyecto ni nada que ofrecer a la gente”.
Lo dijo la presidente Claudia Sheinbaum Pardo en alusión directa a declaraciones que supuesto dio el dirigente nacional del PAN, Jorge Romero, pero este aclaró que su expresión fue mal interpretada por la Presidente y la reviró: “en su manera de dirigirse a la oposición, usted se define como Jefa de Estado”.
Gracias por su atención, hasta el lunes si Dios quiere. ¡Salud!