El Pacto fiscal y la rebelión de Jalisco
El Juglar de la Red
Por Rafael Cano Franco
El todavía gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro, anunció que iniciaría los trámites legales para que esa entidad del occidente de México se separe del pacto fiscal, esto derivado de las reducciones que Jalisco viene recibiendo los últimos dos años en las participaciones federales, a pesar de que es una de las entidades que mayores recursos aporta al gobierno federal.
El pacto fiscal es una figura que data de 1978 y se instituyó con varias finalidades: una relación justa entre estados y federación en materia de gasto; promover la coordinación y cooperación fiscal; garantizar la estabilidad financiera de las finanzas públicas; fomentar el crecimiento económico y desarrollo regional; reducir las desigualdades regionales, por mencionar solamente algunos de los puntos que le dieron origen.
El asunto es que, desde el sexenio pasado, el gobierno mexicano empezó a centralizar el uso de los recursos, esto para financiar sus programas sociales y si bien el esquema fue muy bien aceptado por los ciudadanos beneficiarios, el impacto presupuestal que tiene obligó a desaparecer organismos, adjudicarse el dinero de diversos fondos e incluso reducir las aportaciones federales a las entidades federativas.
Esa actitud avara del gobierno federal no tuvo mayor repercusión en las entidades que gobierna el partido en el poder o sus aliados, esos gobernantes guardaron un silencio institucional y políticamente conveniente a sus propios intereses; pero desde el 2021, estados como Jalisco han venido planteando el rompimiento del pacto fiscal.
Jalisco es uno de los estados más importantes de Méxíco, su economía es poderosa y en constante expansión representando el 7 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional; además es un importante centro industrial, tecnológico, agrícola, turístico y cultural , lo cual lo convierte en una fuente significativa de empleo y es una de las fuentes de ingresos fiscales para el gobierno federal más significativa.
En el casi medio siglo que tiene funcionando el pacto fiscal, no necesariamente se han cumplido las finalidades que le dieron origen; de entrada, fomenta el centralismo y una injusta distribución del ingreso, que si bien se manifiesta en las finanzas estatales, es en los Ayuntamientos donde mayormente se refleja.
En términos generales, por cada peso que los ayuntamientos aportan, el gobierno les devuelve once centavos, pero en muchos casos es una cifra que se reduce hasta los 7 centavos; en el caso de los gobiernos estatales, por cada peso, el gobierno les regresa el 41 por ciento, de acuerdo a las cifras anteriores el gobierno federal se queda con 47 centavos, a veces esa proporción se eleva a 51 centavos.
Luego de que en sexenio pasado se centralizaron los servicios de salud y también los servicios educativos, el gobierno federal tuvo el pretexto perfecto para reducir sus aportaciones federales a los estados; sin embargo, las fallas y quejas por la deficiencia en los servicios médicos es una protesta que reciben los gobernadores y en el caso de la educación es evidente la reducción en la calidad educativa derivada de la implementación de un nuevo proyecto de educación básica.
Pero lo más evidente es que en ese casi medio siglo de estar vigente el pacto fiscal, las diferencias entre las regiones o entidades de México no cambiaron sustancialmente: las entidades de mayor progreso lo siguen siendo y las más atrasadas no alcanzan a superar los problemas derivados de la pobreza.
Con todos los antecedentes, el gobernador de Jalisco, presentó una iniciativa ante el Congreso de esa entidad para crear una ruta y salirse del pacto fiscal, acusando al gobierno federal de cometer abusos con aquellos estados que más dinero recaudan a través de impuestos como el IVA, ISR y el IEPS.
La visión de Enrique Alfaro es que el pacto fiscal castiga a los estados que más recaudan y no ayuda a salir de la pobreza a los estados que más necesitan los apoyos. Ante esto, la postura que asumió el gobierno de Jalisco no va en sentido de dejar de ayudar a los gobiernos estatales de entidades que presentan rezagos en su desarrollo, sino generar un reparto más equitativo.
Para el 2025, la Secretaría de Hacienda contempla como aportación federal para Jalisco 141 mil 238 millones de pesos y aunque la cantidad es evidentemente alta, está un 8 por ciento debajo de lo que debiera recibir.
Ante la postura y las acciones emprendidas por el gobierno de Jalisco, al presidente Claudia Sheinbaum le echó la bolita al próximo gobernador, Pablo Lemus, quien asumirá el Ejecutivo Jalisciense el próximo 6 de diciembre, pero también desestimó la idea de que quien más aporta, más recursos debe recibir y respondió que la prosperidad compartida es la visión que alienta el pacto federal.
Actualmente Morena es gobierno en 25 entidades federativas, pero además de Jalisco hay otras siete entidades que están en manos de la oposición, lo interesante será ver si alguna de ellas sigue el camino que está marcando Enrique Alfaro.
Y siguen apareciendo nuevos impuestos y aumentos
Pues aquella expresión de que ser aliados del gobierno federal nos generaría una gran aportación de recursos y apoyos presupuestales, parece que no fue tal y es que ante el evidente recorte presupuestal federal, vía las aportaciones a las entidades, el gobierno de Sonora decidió aumentar algunos cobros y crear nuevos impuestos.
Lo anterior, a pesar de que Alfonso Durazo había dicho que no habría tales aumentos o nuevos impuestos; para ello se inventó toda una narrativa gubernamental que al irse conociendo los detalles del contenido del Presupuesto de Ingresos del 2025, poco a poco la narrativa se derrumba.
Mire usted: la tenencia vehicular y su refrendo aumenta de mil 500 pesos a 6 mil pesos, un incremento del 300 por ciento; existe la idea de cobrar un 5 por ciento a quienes renten casas a través de plataformas digitales; se propone crear el impuesto ecológico para quienes daños al medio ambiente y aumentan en diversos porcentajes todos los derechos que cobra el gobierno de Sonora.
A todo lo anterior súmele el impuesto a bebidas alcohólicas, los impuestos cedulares a profesionistas y por la compraventa de bienes inmuebles y a todo eso la contratación de casi 5 mil millones de deuda pública.
Con todo lo anterior es más que evidente que ser aliados del gobierno federal no se traduce en un gran apoyo presupuestal y es por eso que Alfonso Durazo propone elevar el ingreso estatal cobrando esos nuevos impuestos, aumentando los cobros de servicios y derechos, y con la contratación de más deuda pública.
Tips cortitos pa´no enfadar:
1.- Es momento de que las dirigencias de la Coparmex o de otras asociaciones empresariales, industriales, agrícolas o ganaderas, se manifiestan a favor de la propuesta de aumentar en un uno por ciento el impuesto a empresas con más de cien trabajadores para dedicar ese recurso a financiar un fideicomiso para atender el tema de seguridad pública.
Si la propuesta tiene el visto bueno de los organismos empresariales, sería el momento de empezar a leer los desplegados de apoyo, que surgieran conferencias de prensa para avalar esa propuesta; en fin de que se manifestaran en pro de lo que supuestamente están proponiendo.
Pero no, no hay nada. Salvo el vocero Marco Paz Pellat, no hay otra voz que se haya manifestado a favor o ponderando los beneficios de esa propuesta.
Los que sí dijeron que les gusta fueron los diputados oficialistas, Omar del Valle y Elly Sallard; pero de ahí en fuera ni siquiera los supuestos Comités Ciudadanos de Seguridad Pública han expresado una postura a favor.
2.- La Comisión por la Igualdad de Género del Congreso de Sonora, aprobó el dictamen presentado por el Comité Calificador para la edición 2024 de la Presea del Poderío de las Mujeres Sonorenses y cuyas galardonadas son:
María Dolores del Río Sánchez, Margarita Ramírez Celaya, María Elena Barrera Mendívil, Rosario Román Pérez, Susana Angélica Pastrana Corral, Marcia Contreras López, Ana María López Rodríguez, Selene Carolina Ramírez García, Alina Imelda Trujillo Rodríguez y Mireya Scarone Adarga.
En lo particular nuestro reconocimiento a la colega Alina Trujillo, quien se hace merecedora de tal galardón en el área de periodismo donde se ha distinguido por muchos años y con un trabajo constante.
Hay otros casos que más parecen un premio político, que un galardón merecido.
Otros Juglares:
--“Con esta iniciativa proponemos condiciones mínimas para un nuevo Sistema de Coordinación Fiscal, basado en la entrega de recursos por competitividad, pero sin olvidar el valor de la cooperación y la solidaridad. El planteamiento de Jalisco es: queremos seguir ayudando a los estados que más lo necesitan, pero lo que no podemos permitir es que nos sigan pisoteando”.
Postura expresada por el gobernador de Jalisco, Enrique Alfaro luego de presentar ante el Congreso de esa entidad una propuesta para salirse del pacto fiscal, al que consideró anacrónico e inoperante, además de ser lesivo para aquellas entidades que más recursos aportan al gobierno federal pero que paulatinamente han visto que las aportaciones de la federación se han reducido.
Gracias por su atención, hasta el viernes si Dios quiere. ¡¡Salud!!