En junio, no descarte un atentado

ESTE NUEVO ESQUEMA PARA esta campaña a la presidencia y que conlleva un período de veda de 40 días, poquito más allá de terminada Semana Santa, es una novedad interesante.

Claro está, desde que se diseñó esta metodología –septiembre u octubre del año pasado--, se establecieron tres bloques:

Primero se determinó un plazo para que todos aquellos que quisieran buscar la presidencia de la República se inscribieran y que su respectivo partido lo aprobaran de tal manera que de haber dos o más pretensos entrarían al período de pre campañas que hace poquito terminó.

Este ejercicio democrático sin duda alguna buscaba que las contiendas internas de los partidos se robustecieran, pero los actores actuales definieron y elevaron a nivel de alianza su participación, causando con ello un retroceso en el juego democrático que se esperaba ocurriera dentro de cada partido.

El otro experimento sin duda fue el darle participación a los candidatos independientes, pero ese será otro tema para más delante.

Con esta participación en alianzas lo que se logró fueron el surgimiento de esperanzas caídas de parte del PRI, PAN y PRD, es decir, se provocó desilusión y con ello nació un fenómeno estructural que debilitó momentáneamente a las instituciones políticas y cuyos alcances aún no se avizoran con exactitud.

Y si los consejeros del INE habían visualizado un fortalecimiento de la democracia interna partidista, simplemente no les funcionó la ecuación pues de haber querido ese avance y aunque el hubiera no existe, debieron de haber cambiado la ley al provocar que cada partido nombrará como base a tres candidatos a la presidencia de la República para despertar un sentimiento democrático efectivo y un interés general de participación. Pero no lo hicieron.

Segundo: se abrió el impasse de los cuarenta días mediante el cual los candidatos tienen prohibido promocionar el voto. En este aspecto el más afectado será Morena pues la fragilidad de la mente de las masas es tal que olvida con prontitud si no se le nutre de manera constante con la medicina Amlocidina.

De hecho y que curioso, la manera como AMLO puede permanecer en la mente de los mexicanos es viéndolo o escuchando sus palabras por redes sociales, principalmente y el detalle es que, según especialistas, el objetivo que deben lograr los estrategas de Morena es que se hable de su candidato, bien o mal, pero que siga en la memoria de las masas.

No debe haber vacío a su alrededor en los medios, como está sucediendo. Por ello han incrementado el número de nuevas melodías y una que otra campaña pero muy flojas y sin sustentos. Como que se tomaron unos días de vacaciones los responsables de mantener hasta en los frijoles con gorgojos a Andrés Manuel.

Tercero: La campaña para la presidencia durará noventa días. Del primero de abril al primero de julio.

En abril, que pudiéramos considerar el primero de los bloques, Morena puede llegar a sufrir buylling extranjero y de sus opositores mexicanos pues el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, adelantó sus elecciones de diciembre a dicho mes y con la presión internacional, sobre todo de Trump, con seguridad habrá violencia por un lado y por el otro, los estrategas morenos aún no han mostrado una campaña para contrarrestar la carga negativa presente y futura que pesa sobre AMLO sobre la implementación en México de un régimen similar al de dicho país.

En el segundo bloque, es decir, en mayo, los días (1, 5,10 y 15) servirán para que todas las fuerzas rijosas del país salgan a las calles a buscar hacer trastabillar la gobernabilidad de México y a la espera de que en los actos violentos que con seguridad se van a dar, se presenten algunos mártires. El PRI llevará las de perder si no cuenta con una estrategia ante estas problemáticas que se presentarán. Ya me estoy imaginando las manifestaciones de miles de personas y sobre todo, queriendo multiplicar este tipo de actos en el país.

Y en junio que es el último mes de la campaña, estaremos viviendo en la zozobra pues para entonces y como suele suceder, se hablará de un empate técnico entre los tres principales contendientes, sobre todo después de los debates televisivos que se presentarán. Y todos los equipos estarán comiéndose las uñas.

Vamos a observar a su vez que el ambiente se va a enrarecer y apasionar de tal manera que no descarte algún tipo de atentado, lo cual sería una desgracia para México. Cruz, cruz.

EN FIN, por hoy es todo, el lunes le seguimos si Dios quiere.

Armando Vásquez Alegría es periodista con más de 30 años de experiencia en medios escritos y de Internet, cuenta con posgrado en Administración Pública y Privada.

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