La rumorología del miedo…

EN TIEMPOS DE EDUARDO BOURS como gobernador de Sonora la Federación le planteó al mandatario la colocación del Cefereso No. 11 en Hermosillo, propuesta que fue rechazada por el contexto que ello significaba: que se vinieran a vivir a la capital de Sonora los mandos primarios y secundarios, así como algunos familiares de los encarcelados.

Con la llegada de Guillermo Padrés al poder se ponderaron algunas consideraciones al respecto, sobre todo el hecho de que pertenecería a una columna de centros de readaptación social federal que serviría para una mayor movilización de tan peligrosos delincuentes.

Fue así como se definió su construcción casi en el kilómetro 34 de la Costa de Hermosillo. La Federación adquirió cien hectáreas, puso en el centro la prisión y en un cuadrado, con ventanas pequeñas por donde entra poco sol y aire, –además de anchas y hondas paredes--son una caldera en tiempo de sol y una congeladora en invierno, más de tres mil presos de la más alta peligrosidad sufren los horrores del clima sonorense adentro de dicho penal y cientos de miles viven la zozobra de saber que esos tipos están viviendo allí.

Al menos es lo que se sabe, ya las leyendas urbanas retratan más escenarios al respecto.

Por eso, en cuanto se supo que Rubén Oseguera González, alías “El Menchito” e hijo de Nemesio Oseguera Cervantes –alias “El Mencho” y líder del cártel Jalisco Nueva Generación--, en Hermosillo se desató una rumorología fuerte mostrando el temor de que llegue gente así a la capital sonorense. Y no de visita, sino a vivir aquí, en las colonias de primera clase uno y de segunda, otros.

De hecho, el cambio de penal se da luego de que el pasado 22 de julio, a través de redes sociales, surgiera el rumor de un posible intento de rescate del Menchito por parte del CJNG pero del Cefereso 15 ubicado en Chiapas, construido también por el gobierno de Felipe Calderón y que tachó de ser la columna vertebral de cárceles de alta seguridad.

La bitachera generada el pasado viernes seis de septiembre, fecha en la que se conoció dicho traslado, obligó a las autoridades locales a emitir un pronunciamiento que ocurrió este sábado por la tarde en el cual establece David Anaya, titular de la SSP en Sonora, que la estancia del Menchito sería por unos días, mientras los gringos vienen por él.

Y aprovechó el foco de atención para aclarar que no se debió construir este tipo de penal en Sonora, ya que son detonadores de violencia como ocurre en otros estados que operan Ceferesos .

Pero lo del Menchito y la presencia del CJNG pica más al conocerse que es una organización criminal efectiva, tipo empresa según los diferentes escritos al respecto, y que es muy efectiva en su trabajo donde a sus integrantes, por cierto, les paga muy bien.

Y si a esto le unimos lo que han señalado algunos nuevos titulares de las corporaciones policiacas en el sentido de que estaban corrompidas sus filas por el narco, en el sentido de que recibían policías recursos económicos, pues con más fuerza la rumorología del miedo cabalgó sola por el monte. Fue impresionante el miedo causado.

Sobre esto del ataque a la corrupción en las corporaciones policiacas resultó que no existe en lo específico una ley que permita castigarles. Cada Estado se bandea como puede este aspecto y el delito puede ser simplemente administrativo y no hay justificante legal, pues, para poder detener esta corrupción, algunos mencionan el cohecho, pues no hay que olvidar que son funcionarios públicos.

Pero es difícil castigarles si no hay una ley adecuada a esto. Claro, lo más fácil es decir que no pasaron los exámenes correspondientes, pero ello está en un hilo pues recuerde que los Centros que realizan dichas evaluaciones nunca dan los resultados, ni metodología, ni nada, simplemente definen quien pasó y quién no.

¿Corrompibles dichos funcionarios que ponen las evaluaciones?... ¿usted qué cree?, estimado lector.

Pero focalizando el problema de la corrupción en las corporaciones policiacas, lo que dice Odracir Espinoza en una de sus últimas entrevistas es muy cierto. Quiere el gobierno federal imponer a los fiscales anticorrupción al frente de una lucha mediante la cual se castigue a los policías corruptos, pero ello no será posible mientras no se adecuan las leyes respectivas.

Lea la entrevista a Odracir, verá que interesante está: http://cort.as/-PvrT

El detalle es que mientras por un lado la ciudadanía se vuelve más temerosa ante los personajes que ya cuentan con fama internacional, por el otro vemos a un Presidente de la República que les hace un llamado a que se porten bien, que no roben, que no maten, que no secuestren… ¿nadie le ha dicho a AMLO que es una industria y que por eso se llaman crimen organizado?... no esto, no aquello.

Ya me imagino las risotadas de todos los que manejan la maña en México.

EN FIN, por hoy es todo, mañana le seguimos si Dios quiere.

Armando Vásquez Alegría es periodista con más de 30 años de experiencia en medios escritos y de Internet, cuenta con posgrado en Administración Pública y Privada.

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