Todos los policías federales andan armados

A CÓMO HEMOS VISTO el desarrollo del movimiento de los policías federales, que tratamos en la columna anterior, contextualizado en el caso de las organizaciones informales, todo indica que la tendencia es a que desaparezca. O bien, que la terminación sea violenta y sangrienta.

Verá usted.

Los policías federales intentaron elevar la situación a problema político, invitando a Felipe Calderón para que actuara de intermediario, a lo cual el ex presidente ex panista rechazó el ofrecimiento.

Luego se manejó que la mano negra a la que tanto se refería AMLO detrás de este movimiento era Miguel Ángel Osorio Chong, quien es el principal de los senadores priistas y la conclusión la sacaron los diferentes columnistas siguiendo la huella de las palabras del presidente quien habló como origen los sótanos de la Secretaría de Gobernación del sexenio pasado. Pero se equivocó. No era por ahí.

Cuando las organizaciones que nacen a raíz de este tipo de movimientos, buscan la formalidad deben transmutar –en este caso lo más pronto posible--, a conformar una estructura y según lo publicado apareció un tal Ignacio Benavente, presidente de la organización Pro Libertad y Derechos Humanos en América, quien acompaña a los inconformes y quien dijo que confiaba en que esta situación se resuelva con diálogo y en paz, ya que el Presidente de la República no permitirá que esto llegue a mayores. https://bit.ly/2YwtV62

La información publicada en Excélsior, señala:

En un breve mensaje a medios de comunicación, denunciaron que elementos del Ejército Mexicano y la Marina se encuentran en los alrededores, una situación que no se ha podido corroborar, por lo que responsabilizaron a las autoridades de lo que pueda ocurrir.

Intrínsecamente se habla de la posibilidad de un enfrentamiento y no creo que sea a besos.

Aquí hago un corte. Esa petición que se lanzó para que se paralizará en todo el país la acción que corresponde (administrativa y operacional) al funcionamiento de la policía federal, se manejó en algunos estados, pero la prensa sacó de foco este movimiento. Ya se ha de imaginar los por qués.

El hecho es que cuando, aquel primero de junio del 2009 conformó Felipe Calderón una ley modificatoria para impulsar el profesionalismo y capacidad general de los policías federales, lo hizo con mira a su combate al narco.

El hecho es que de entrada, obligó a que los pertenecientes a dicha corporación, de entrada, debían contar con un título de profesionista. Luego, se les entrenaba un año en materia de uso de armas, manejo de vehículos y estrategias y tácticas policiales.

Esto no lo tiene la milicia que por lo general llegan a prepas.

Esto lo comento para que se de una idea de la capacidad académica de unos y otros y porque el trabajo de los militares es reactiva, no preventiva como en el caso de la PF. De hecho, quienes pertenecen a la milicia no están preparados en el nuevo modelo de juicios orales. Saque sus propias conclusiones.

Hay un punto muy importante en este aspecto: aun no les piden a los policías federales sus pistolas, lo cual será un punto álgido en esta lucha de los agentes del orden. Y que no creo que será en estos días.

Asimismo, vale la pena señalar que todos los PF fueron sometidos a la evaluación con el Control de Confianza, por eso no quisieron ser sometidos al polígrafo.

Alfonso Durazo les propuso en una medida de negociación que eliminaría la rotación, permitiendo que las familias se queden en el Estado que el PF requiera, lo cual fue una jugada débil.

Déjeme comentarle que el hecho de que los PF hayan pasado por las universidades, les cuadró, limitó y amplió en base al método científico, su capacidad de raciocinio, razón por la cual dudo que se vayan a cambiar de bando e irse a con los narcos. Por eso, ese detalle no es el problema.

Lo que no hizo Durazo fue poderles ofrecer un futuro mejor pues no dejan de tener licenciatura, lo cual debió manejar. A lo mejor lo hace más delante como estrategia.

Y es que lector. Terminar una licenciatura, permite analizar, establecer parámetros, avizorar circunstancias, manejar tiempos, es otro nivel que el secundariano o del prepa. Por eso insisto en que será difícil que se vayan con los contras los de la PF.

Pero hay un punto que siento que los negociadores de gobierno no han entendido. Es el contexto del orgullo de pertenencia. El nuevo modelo de policía de la Guardia Nacional no aplica para quienes cuentan con licenciatura y ese es uno de las complejidades que no inteligen ni Alfonso Durazo y sus operadores.

El detalle es que siguen apretando y ofreciendo cada vez menos de lo que esperan los afectados. Recuerde lector dos cosas:

En las negociaciones, cada parte debe ceder algo y para que finiquiten adecuadamente se deben establecer las nuevas reglas acorde a lo que se tiene y en este tenor, los integrantes de la PF tienen más, por lo menos académicamente, que lo que pudieran tener el resto de quienes quieran pertenecer a la Guardia Nacional cuyo requisito esencial es que cuenten con preparatoria.

Insisto, si el tema sigue es que Alfonso Durazo no le ha encontrado la cuadratura al círculo y si crece este movimiento entre los 20 ó 30 mil integrantes, será más difícil que logre encontrarle una solución adecuada a la problemática. Según yo, si las cosas pasan de este domingo, se ingresará a una espiral que para, detenerla, se deberán aplicar estrategias de mayor calado y por ende, la situación tomará otros tipos de caminos, los cuales, lector, a nadie benefician.

EN FIN, el lunes le seguimos si Dios quiere.

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